Hola corazones:
Hoy quisiera profundizar en el tema de los buenos propósitos que nos hacemos con cada nuevo año que comienza. A menudo decidimos apuntarnos al gimnasio, llevar una alimentación saludable etc. etc. Pero al cabo de unos meses lo volvemos a dejar e incluso en ocasiones, ni comenzamos a hacer dichos cambios propuestos.
¿No será que esos objetivos no están para nada alineados con lo que nosotros somos? ¿No será que no tienen nada que ver con nosotros y nuestro estilo de vida? ¿Será que no nos escuchamos ni conocemos lo suficiente a nosotros mismos? Os propongo que miréis dentro de vosotras mismas ( bueno a partir de ahora elijo hablar en femenino, si hay algún varón por aquí siéntase incluido. Es por comodidad de no estar todo el tiempo poniendo el (os) y seguir utilizando un lenguaje inclusivo)
Como os decía, es mejor que investigues a fondo tus dones, aficiones y gustos antes de lanzarte a lo que la mayoría hace y que carece de todo sentido común, que por otro lado una profesora mía decía que es el menos común de todos los sentidos. Pues eso, antes de apuntaros a alguna actividad nueva, mirad bien si resuena con vosotras con vuestra esencia, si es algo que siempre os ha llamado la atención y entonces y sólo entonces, después de haberle dado esa vuelta, os apuntáis y ya veréis que contentas vais y que feliz os hace.
A veces también es por necesidad, a mí me pasa con la informática que no me gusta nada, pero es indispensable para darme a conocer y poder ofreceros contenidos, ofertas, PowerPoint y demás. Así que éste año me apunto a seguir perfeccionando éstos conocimientos ya que no quiero ser una analfabeta digital.
Y en éstos tiempos si quiero seguir ofreciéndote mis servicios también online, no me queda otra que seguir este difícil camino del aprendizaje, y es que cuando algo no gusta siempre se hace más cuesta arriba, pero si es una afición que no devenga en nada profesional y encima lo hacemos por que lo hace todo el mundo mejor olvidarse y hacer algo que verdaderamente nos llene… Y esto pasa con todo madrugar comer más fruta…
Primero analicemos bien qué queremos conseguir y la mejor forma de hacerlo y así comenzando por lo mismo que seamos capaces de soportar en 21 días habremos conseguido crear el nuevo hábito que luego se convertirá en una rutina y después en una costumbre. Bueno y esto es lo que hoy os quería compartir, espero os ayude a reflexionar antes de lanzaros a la desesperada. Un abrazo.