De repente todos tus planes cambian, alguien ha dado positivo en la familia y por contacto estrecho debes hacerte las pruebas. Avisar en el trabajo y dejar de relacionarte con todo tu entorno, parece cómo si todo tu mundo se hubiera parado y de nuevo llega para ti el confinamiento.

¿Cómo hacer frente a tanta incertidumbre? De pronto te empiezas a sentir mal y temes haberte contagiado del Covid. En un momento así sólo se me ocurre que debo mantener mi ánimo alto. Enviar luz a mi cuerpo y sentir cómo sana.

Un parón en tu vida totalmente Inesperado, cuándo recuperas las energías te encuentras con demasiado tiempo libre y puedes aprovechar para hacer eso para lo que nunca sacabas tiempo. Todo menos hundirte y victimizarte.

A veces no es fácil y lo sencillo es dejarse llevar por el miedo y el desánimo. Pero de que nos serviría esto? Sólo empeoraría la situación. Así que me aplicó el cuento y me lo tomo de la mejor manera no sin dejar de cuidarme y estando atenta a los síntomas por si empeoran.

Y debo acudir a urgencias de inmediato. Confío en que esto no me suceda y lo pueda pasar cómo si de una gripe se tratara. Y esto es lo que os traigo hoy, ya que es lo que me traigo entre manos. Espero que vosotros no tengáis que aislaros ni os contagiéis.